En un país toda persona tiene derechos y obligaciones, pero cada individuo elige como los llevará a cabo. Los derechos humanos son facultades fundamentales que como seres humanos poseemos y la legalidad, garantizada en todo país por un sistema jurídico basado en un conjunto de leyes o normas jurídicas.
Padecemos de un gobierno que un día dejó de importarle lo que el pueblo pensaba, que le importó más el poder que el bienestar del país y se quedó callado escondiendo en su puño la justicia.
Cada individuo, hoy en día, lucha por sobrevivir en un país donde parece que ya no hay libertad, al menos para los justos. Cada día y a cada instante, a alguien le quitan un poco de su dignidad mientras no se hace justicia, aunque no lo parezca; la dignidad y la justicia están enlazadas por el hecho de que alguien que tenga dignidad va a luchar por sus derechos.Tenemos la libertad de expresar lo que sentimos cuando vemos que algo no es justo.
En nuestro país se supone que debería de haber igualdad, pero yo a mi corta edad sé en qué país vivo, pero nadie llegará a decirme "acostúmbrate", porque mientras no deje que se me pisotee por el acaudalado gobierno, lleno de corrupción, egoísmo, parcialidad, des-humanización, esquiroles, etc., se que mi frente seguirá en alto dispuesta a luchar por mi país.
Sobre todo, vivimos bajo un gobierno corrupto donde se paga con dinero lo que debería ser con justicia ¿cómo creer que Benito Juárez, José María Morelos, Ignacio Zaragoza entre otros, les gustaría que su cara tuviera el precio de la corrupción?
Debemos luchar por un país justo, nadie puede pasar sobre ti si desde un principio lo impides.
-Escrito por mi yo del pasado (publicado en el periódico de Ensenada el 04 de junio del 2007)